DEN NUESTRA PAZ A TODO EL QUE CONTACTEN
EL AMADO PELLEUR:
El Puente, diciembre 1960
29 de septiembre de 1960
“YO SOY” Pelleur, el Poder real que sostiene a la Tierra en Su lugar en el Sistema Solar! ¡VENGAN AHORA del letargo a la Luz y entiendan que la propia Tierra misma, aún Su eje estando inclinado, no permanecería ni las almas pertenecientes a este planeta permanecerían sobre este pequeño globo si no fuera por el poder cohesivo de Mi Amor que la ciencia escoge llamar “la atracción de gravedad” de la Tierra!
¡Piensen en eso! Cuando colocan su pie uno delante del otro en una tarea asignada, humana o Divina, si no hubiera poder cohesivo que es el poder del Amor Divino debajo de sus pies ustedes navegarían hacia el espacio exterior…
Ese Amor es la sustancia real sobre la cual se paran. Es la sustancia que compone sus sillas sobre las cuales se sientan. Es ese Amor que sostiene a todos los Seres Quienes pertenecen a esta evolución y que han sido aceptados por esta evolución en la órbita de la Tierra.
Así que nosotros representamos, como hacen todos aquellos Quienes Nos han precedido, el Poder de contracción y expansión. La Tierra respira saben, y a través de sus muchos poros viene la Luz Rosa desde Su centro.
Cuando la Tierra no respira, ustedes han atestiguado cierta porción, si no en persona al menos en imágenes donde gran destrucción fue hecha, la Tierra por el momento no respiró allí. ¿Qué tienen? Arenas del desierto sobre la cual nada puede crecer o pantanos estériles. Todo esto está en el proceso de redención.
Ahora tomen sus propios cuerpos- ¿cuidarían tener a diez billones de personas que utilizaran su propio cuerpo físico como ellos deseen durante veinticuatro horas? ¡Pienso que no!
Entonces piensen cómo Nosotros, los Directores de los Elementos, junto con Nuestros grandes Reinos Nos sentimos cuando hemos dado Nuestra Propia Vida Corporal, con paciencia, teniéndola tan imperfectamente usada. No es parte de la bondad ni de la sabiduría.
“YO SOY” fuerte en Mi esfuerzo de transmitirles EL PODER que yace dentro de la cooperación con los Directores de los Elementos AHORA, y luego debería surgir una ocasión donde individuos o cualquier cosa viviente que requiera asistencia, ustedes siendo Nuestros amigos Divinos, pudieran dar y darán ese balance, paz y entendimiento sereno a pesar de que puede que no tengan que pronunciar una palabra.
Es en el AHORA, HOY, que Nosotros pedimos que esa Paz sea creada entre ustedes y los seres de la naturaleza… Den nuestra Paz a todo el que contacten.
Pelleur
La Palabra, Julio 1995