EL ARTE DE CONVERTIRSE EN UN CONDUCTOR PARA LA CURACIÓN

LA AMADA KWAN YIN:

Abril 1955

¡Amadas y benditas flores en el jardín del Señor de la Esperanza!

A medida que respiro el perfume irradiando desde sus esfuerzos serios y sinceros a través de los años y a medida que reúno la cosecha de su amor a la Luz, estoy agradecida que, entre la humanidad de la Tierra, existan corrientes de vida individuales encarnadas, llevando puesto aún los lazos kármicos de su propia hechura, deseosos de traer los regalos de misericordia, compasión y curación para esta raza.

Durante muchos años he sido conocida como el Espíritu de las Llamas de Misericordia y Compasión. Me gustaría hablarles acerca de esa Llama de Misericordia porque Su Presencia es muy importante en el mundo de sentimiento de aquellos que deseen curar.

¡Ninguna curación permanente de mente y cuerpo puede venir sólo a través del esfuerzo de la voluntad humana, amados seres! Su mundo de sentimiento está compuesto de mucho más de la mitad de su energía de vida y la cualidad fluyendo a través de sus sentimientos es la “conductora” a través de la cual fluye esa esencia curadora-calificada hacia dentro del mundo de aquel que desean beneficiar.

Benditos seres, su mundo de sentimiento es el puente sobre el cual fluye el elixir de vida calificada acumulada de la curación, entrando en la mente del paciente para disipar las sombras; entrando en sus sentimientos para disipar la depresión; entrando en su carne para resucitarla y traerle nueva vida.

A través de las eras, han habido individuos que han practicado el arte del poder curativo manifestándose y que han desarrollado una extraordinaria capacidad para el sostenimiento de un concepto mental que esté comparativamente libre de imperfección.

Esto se ha desarrollado a una ciencia mediante la cual ese concepto, a través de un profesional entrenado y poderoso, puede ser introducido dentro de la conciencia del paciente y aceptado mediante el esfuerzo de la voluntad humana.

Sin embargo, casi sin excepción, encontrarán que cuando el individuo que está prestando el servicio es removido de la Tierra con la tan-llamada ‘muerte’, la condición volverá nuevamente en el paciente en esa encarnación, o permanecerá para ser transmutada en Luz en una vida Terrenal subsiguiente.

Comprendan, a través de las edades, han sido grabados sobre el cuerpo etérico muchos, muchos efectos establecidos por causas de imperfección en pensamiento y sentimiento. Estos se manifiestan posteriormente sobre la pantalla de la vida como enfermedades de mente y cuerpo.

Mediante el esfuerzo de la voluntad ellos a menudo son presionados o forzados a regresar de nuevo a la vestidura etérica pero no transmutados en Luz en los niveles internos; por lo tanto, ustedes no tienen una purificación permanente y sostenida de la corriente de vida.

Aquellos curadores que prestan un servicio de una naturaleza permanente (como el de su Maestro Jesús), usan sus mundos de sentimiento como el “conductor” a través del cual fluye la Llama de la Misericordia y Compasión. Jesús encarnó esa autoridad en Su afirmación frecuentemente repetida: “¡Tus pecados te sean perdonados!” también “¡Levántate y camina!”

Ahora bien, estas Llamas de Misericordia y Compasión estimulan dentro del pecho de muchos hombres y mujeres como una vocación, aunque no todos ellos son necesariamente curadores espirituales. Muchas de estas personas actúan en la profesión médica y ministran de otras maneras las mentes así como también los cuerpos de la gente.

Cuando vemos que se estimulan estos sentimientos en cualquier individuo, sabemos que tenemos un nuevo candidato para Nuestros Templos Cósmicos de Misericordia – nuevos estudiantes que están listos para ser enrolados entre los Hermanos y Hermanas de la Compasión. Los elevamos hasta un punto en donde sus sentimientos se conviertan en maestros de la energía que ellos contactan. Me gustaría traer esto a su atención hoy porque la Compasión es una cualidad positiva.

La Compasión, atestiguando el requerimiento del momento, no permite que los sentimientos dejen la Llama Corazón con una aceptación de la apariencia discordante. No acepta que haya un poder más grande que Dios.

Luego, con el equilibrio maestro de ese anclaje-Divino, los poderes curativos son atraídos y proyectados al ser en necesidad. Todo este tiempo su propia Presencia Electrónica, a través de su mundo de sentimiento, está en completa maestría de la condición o circunstancia.

Es muy importante que entiendan esto. Comprendan que la propia naturaleza de aquellos interesados en curación usualmente los hace extremadamente sensitivos a la aflicción. En su ansia por ayudar, a menudo ellos están propensos a aceptar como “real” las apariencias en el mundo de la forma. Al hacerlo, no sólo se agotan ellos mismos, sino que ellos también magnifican esas aflicciones en su prójimo.

Nuestro Amado Maestro Jesús fue una corriente de vida muy positiva, amados seres. Si hubiera permitido que Sus cualidades positivas de Compasión y Misericordia se convirtieran en la aceptación negativa de la insanidad, leprosidad y muerte misma, no hubiera sido el Maestro victorioso que fue, ni se hubiera convertido en el ejemplo perfecto a seguir por todos sobre esta Tierra.

Si van a convertirse en un poder curativo en este Universo, deben convertirse en una fuente de energía controlada positivamente. Su alma es la conciencia acumulada a la cual estoy hablando esta mañana. Su conciencia externa ha grabado dentro de ésta la duda y el miedo, las experiencias e impresiones que han adquirido a través de todas las centurias que han vivido.

Ahora deben tomar su alma y, en la quieta introspección, examinarla bien. Descubran si realmente creen con su corazón y con sus sentimientos que no existe otro poder que el de Dios.

Cuando dicen intelectualmente – desde los labios – “¡YO SOY el Poder-Divino todopoderoso – no existe otro poder que pueda actuar!” – ¿QUIEREN DECIR ESO?

Ustedes pueden medirse, mis hijos, mediante la conducta de la energía que contactan. Si esa energía no responde favorablemente, no han renunciado a su creencia en cada poder excepto al del Dios Todopoderoso dentro de los confines secretos, profundos de su propia alma. A Dios, Quien es todo amor y todo poderoso, Maestro siempre triunfante – toda energía responde instantáneamente!

La corriente de vida curadora debe ser un individuo positivo. Dentro de su corazón, alma y espíritu, debe estar tan seguro de la Presencia del Padre como lo estaba el Maestro Jesús cuando se paró delante de la tumba de Lázaro y, sin miedo al ridículo o duda en cuanto a la respuesta del alma, llamó – “¡LAZARO, VEN APARECE!” Jesús sabía que el Dios dentro – la Presencia viviente de ese hombre – atraería a Lázaro desde la supuesta apariencia de la muerte. ¡De ese modo, para todo aquel que creyera, Jesús dio una prueba real de que no existe tal cosa como la muerte! Tal apariencia viene únicamente de la aceptación de la conciencia externa.

Ustedes no pueden aproximarse a la curación de las naciones ni a la curación de un planeta que gime en el dolor y agonía con un aceptación negativa de la derrota.

¡No olvidemos por un momento que tratándonos entre sí estamos tratando con amigos, porque soy su Amiga y ustedes lo son de Mí! Juntos, seremos maestros de las energías fluyendo a través de ustedes, que son capaces de elevar y redimir a esta querida Tierra. Ahora, diré “Buenos Días”, queridos seres. ¡Que Dios les bendiga!

Kwan Yin

La Palabra, mayo 1992 -extractos-

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