Las Virtudes de Dios Están Constantemente Fluyendo Alrededor de Nosotros
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En el reino invisible que fluye constantemente a través y alrededor de las almas de los hombres, están todas las virtudes que el ser externo tanto desea, a fin de expresar el cumplimiento de su destino.
Al igual que hay todo el aire que se requiere para sostener la vida en los pulmones de cada persona, animal y planta sobre este planeta; como hay toda el agua que se requiere para purificar la sustancia del mundo físico; como hay todo el sol que se requiere para iluminar cada hogar y cada corazón; y suficiente tierra para sostener el peso de todos los cuerpos y edificaciones, y para producir el suministro requerido para el alimento de la gente; así también hay toda la Felicidad, la Paz, la Salud, la Opulencia requerida para cada corriente de vida que está en encarnación y para todas las que están aún por venir.
Al igual que Dios no proveyó un planeta demasiado pequeño para sostener el peso de la humanidad de la Tierra, Dios no proporcionó un Universo demasiado pequeño para el abundante suministro de la Paz, la Salud, la Opulencia, la Iluminación, la Pureza, y la Luz para la humanidad en evolución.
El hombre, sin embargo, a través del libre albedrío, puede atraer tanto o tan poco de ese Suministro Universal como el escoja. Desde los corazones de los Grandes Seres alrededor del Sol; desde los Elohim, los Señores Solares y la Virtudes, fluyen corrientes constantes que representan Su Sustancia, Radiación y Paz.
Cualquier ser no ascendido, al volcar su atención hacia estos Seres o la Virtud que Ellos representan, puede entrar dentro de esta Corriente a voluntad, y bañarse con el Amor, la Belleza, la Pureza, o la Paz de este flujo Cósmico; y encontrar su conciencia individual grandemente elevada en su viaje hacia la Perfección.
Inviten a estas corrientes a través de la contemplación, lo mismo que el ser externo ha invitado, con éxito, a muchas corrientes de un elemento perturbador que ha limitado el crecimiento del alma en el pasado.
Libro: Conciencia Divina, LAINEC