EL SER EXTERNO NO ES MUY CONFIABLE

Gautama

EL AMADO GAUTAMA:

El Puente, agosto 1957

En la experiencia de la vida del mundo externo, los individuos algunas veces trabajan durante una vida entera, sólo para obtener para sí mismos una anualidad, un hogar o una seguridad general. S

in embargo, a menudo, justamente cuando el regalo está dentro del alcance o quizás ha sido recibido, el individuo preocupado hace la transición de esa encarnación en el mismo momento en que su energía de vida entera ha sido consumida y su búsqueda de la felicidad ha resultado en la exteriorización de eso a lo que ellos dedicaron su pensamiento, sentimiento, palabras y acción – ¡su vida entera!

También eso es cierto en las cosas «internas».

Desde el momento de Mi Propia Ascensión consciente, he visto chela tras chela y neófito tras neófito que deseaba la Presencia visible, tangible del Maestro.

Luego, cuando el chela logró esa maestría de clarividencia (verdadera vista interna) y la clariaudiencia (verdadera audición interna); cuando fue suficientemente inci­sivo en la concentración; cuando una dispensación le permitió siquiera una vislumbre centelleante de ese Ser Ascendido, tal ser cesaría sus propios esfuerzos y se convertiría en sí mismo en «un santificado» – lleno de orgullo.

¡Amados seres, el ser externo no es muy confiable! ¡Aque­llos que no han visto a través del «velo» y quienes sin embargo han tocado el borde de la vestidura de los Seres Divinos; aquellos quienes han aceptado con todo sus seres la ESENCIA y no la forma- ESOS SON LOS «SANTOS»!

Con las palabras de Jesús, Nuestro Amado Hermano, «Bendito son aquellos que no han visto y sin embargo han creído.»

¡Sé cuánto las masas desean fenómenos y cuan poco desean la ESENCIA!

Aquellos que Me siguen; aquellos en el Oriente que son verdaderos Maestros y Gurús aún no ascendidos, usualmente no permiten el ejercicio del fenómeno por esa razón.

La fantasía curiosa y pasajera de las masas no es digna de la inversión de energía que tal fenómeno ocasionaría.

Gautama

La Palabra, diciembre 1993-extractos-

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