LA CURACIÓN INTERNA DE LA ENFERMEDAD

EL AMADO SERAPIS BEY:

El Puente, Enero 1956

Mis amados amigos,

Cada órgano y célula dentro del mecanismo físico tiene una acción vibratoria suya propia, separada y distinta de la acción vibratoria de su vecino. Dentro de los cuerpos internos, hay ciertos centros que vibran al unísono con estos organismos físicos.

Ciertas distorsiones mentales y emocionales dentro de los cuerpos internos afectan al mecanismo físico de una manera discordante, de tal forma que los vehículos internos deben ser armonizados y purificados a fin de tener un alivio y liberación de los ajustes defectuosos del ser externo.

Cuando estas causas internas sean removidas de la conciencia mediante la iluminación de la mente externa, la purificación de los cuerpos internos y la co-operación del ser personal, encontrarán que el efecto aflictivo en el organismo se disolverá y se estará retirando.

El sistema nervioso del cuerpo fue provisto para llevar pura luz desde la Presencia “YO SOY” para sostener los diversos organismos y motivarlos de acuerdo a la dirección de la Mente Superior (El Santo Ser Crístico).

La ciencia médica atestiguará el hecho de que el centro del cerebro dirige impulsos de energía a través del sistema nervioso, que preceden toda actividad, consciente e inconsciente.

Cuando los impulsos desde el cerebro son bloqueados por canales nerviosos contraídos o por nervios dañados, el cuerpo cesa de funcionar perfectamente en el área en particular donde ocurre tal bloqueo. ¿POR QUÉ?

Porque la luz (que es vida), es el único poder animador y motivador en el Universo y, si el canal a través del cual pasa no permanece abierto (por una razón u otra), la luz en esa porción del cuerpo, órgano, miembro o célula, disminuye seguramente, no teniendo una estación de alimentación desde la cual extraer.

El sistema nervioso es afectado por todas las vibraciones discordantes establecidas en los cuerpos mental, emocional y etérico. Es como un calcetín que haya perdido su elasticidad, o que se mantenga unido, de forma que el paso del fuido a través de éste ya no sea posible y no llegue a ser adecuado para su uso.

El miedo, la depresión, la incertidumbre, además de la ira y otras emociones violentas, continuamente corroen las líneas de las mismas fibras sensitivas que comprenden el sistema nervioso. Esto causa la vejez, la desintegración y la tan-llamada “muerte”.

El bloqueo del flujo de luz a través del sistema nervioso es la única razón por la que diversas partes del cuerpo cesan de recibir el poder renovador contenido dentro de este flujo de vida natural y, toma lugar la desintegración gradualmente.

¡En el curso ordinario de la Naturaleza, si el sistema nervioso no fuera dañado, aún el pequeño porcentaje de luz asignado para el uso del ser externo de la humanidad hoy, renovaría completamente cada nervio, cada célula, cada tejido, cada hueso y músculo dentro de seis meses a un año!

La luz que fluye a través del sistema nervioso lleva el poder renovador y, cuando los canales a través de los que la luz fluye están desintegrados, cesan los procesos de renovación y rejuvenecimiento.

Toda pobre visión, audición dañada, facultades mentales retardadas, además de todas las enfermedades “devastadoras” a las que la humanidad está expuesta (y, en cuanto a eso, toda expresión imperfecta de enfermedad) es falta de luz, resultando del bloqueo o “líneas rotas” que previamente llevaban luz hacia dentro de esa sección particular de la anatomía que parece estar perturbada.

Harían bien en asegurar un gráfico del cuerpo físico y estudiar el sistema nervioso. Encontrarán que los nervios se extienden por todo el camino hasta las puntas de los dedos de las manos y pies y hacia todos los órganos vitales y estratégicos y que el perfil lindo del cuero cabelludo de conductores de alimentación (que no pueden ser ilustrados en el gráfico) se extienden desde los principales canales.

Si existe una apariencia de aflicción o enfermedad en cualquier sección particular del vehículo, ustedes pueden de ese modo delinear inteligentemente la parte en particular del sistema nervioso que ha sido dañada. Esta puede ser reemplazada y reconstruida mediante la visualización de la luz fluyendo a través de esa sección, reparando el daño hecho.

Luego la corriente de vida debe ser cuidadosamente examinada por la causa dentro que ha destrozado el sistema nervioso en esa sección. Una llamada sincera a su propia Presencia de Dios revelará (en la privacidad de su propio corazón) las condiciones de los cuerpos mental, emocional y etérico que son responsables por el daño.

¡En el Nombre y Autoridad de su propia Amada Presencia “YO SOY” COMANDEN que CESE esa discordia! Esa discordia es meramente impulsos de vibración que son como el batir de platillos de una manera disruptiva. Comanden que cese tal discordia en sus cuerpos y en los de TODA la humanidad.

De esta manera, podrían reconstruir cualquier órgano defectuoso a la salud perfecta en cosa de horas, días, semanas o meses, de acuerdo a sus capacidades y concentración específica. Bendiciones y amor para todos ustedes.

Serapis Bey

La Palabra abril 1990 -extractos-

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